Niños y bebés celiacos

La celiaquía es una de las enfermedades intestinales crónicas más habituales, la Federación de Asociaciones de Celíacos de España (FACE) asegura que uno de cada 200 o 300 nacidos en España puede sufrir de celiaquía.

La enfermedad celíaca es una dolencia digestiva que perjudica el intestino delgado, y esto se debe a la intolerancia persistente al gluten, es una proteína que se ubica en la harina de trigo, centeno, cebada, malta y avena.

La ingestión de alimentos con gluten genera una lesión creciente en las vellosidades del intestino, son las encargadas de absorber los nutrientes de los alimentos y pasarlos luego al organismo. Si estas vellosidades se ven deterioradas, se provocará una mala absorción de los mismos

La enfermedad celíaca puede exteriorizarse en cualquier momento de la vida. Si esta se exterioriza en la infancia acostumbra a hacerlo entre los 6 a los 24 meses de edad, ya que en ese momento, los niños empiezan a consumir harinas y en otras personas se debe a la predisposición genética.

Los síntomas de la celíaca más comunes son: el niño tienen una barriga grande, se produce un retraso en el crecimiento, presentan diarrea prolongada, estreñimiento, pérdida de peso, vómitos e irritabilidad.

La evaluación se logra por medio de una biopsia de intestino y luego se aconsejará la clase de dieta alimenticia que deberá seguirá el niño. Si el niño presenta la enfermedad celiaca antes de los 2 años de edad, se debe hacer la biopsia a los 6 años de edad para confirmar el diagnóstico anterior.